jueves, 28 de febrero de 2019

África empieza en los Pirineos.

Mike Jagger, en una entrevista sobre España, en la época de Franco, decía: “África empieza en los Pirineos”. ¡Y cuánta razón tenía! Pero que entre VOX no será ninguna sorpresa en un país donde un torturador entra y sale en las comisarías, tiene medallas, y cobra pagas extras, después de haber torturado a mujeres en sótanos durante los años que mandaba el enano de voz aflautada. Si uno lo mira objetivamente, VOX cabe en la política española llena de policías fachas, hijos y nietos de franquistas. No todos, gracias a Dios, pero sí muchos de los importantes. En este país, que no se engañe nadie, las fuerzas del orden están llenas de familiares de aquellos franquistas, por eso Franco aún sigue en el Valle de la Vergüenza. Si entra VOX estará en peligro la libertad de expresión, la revista El Jueves, El Intermedio, y todo lo que huela a libertad. Aunque el aborto no se habrá acabado, por muchas tonterías que diga Casado, porque las niñas ricas volverán a ir a abortar a Londres y las pobres lo harán en cocinas y habitaciones. Porque, dicho sea de paso, siempre hemos sido un país un poco facha. Cuarenta años de dictadura no se borran de repente. Basta ver el circo de la impresentable familia Franco. Si entra VOX volveremos a una época oscura de la España carca y mediocre, esa que tantos años nos ha costado dejar atrás.