jueves, 19 de septiembre de 2019

La moral indestructible de los de derechas.

Siempre he creído que los de derechas son personas negociantes, interesadas y que lo tienen muy claro (no hablo del obrero puro, duro y tonto que vota a la derecha). Por ejemplo, si estuvieran en lugar del señor Sánchez e Iglesias ya habrían llegado a un acuerdo hasta en los sobresueldos. Porque ellos son así: van a lo suyo y los demás les importan un huevo. Y eso, según como se mire, es admirable. Por eso suelen conseguir lo que quieren. Si basta ver a los mafiosos Pujol o los pisos buitres de la señora Botella, para darse cuenta de lo unidos que están. Son gente que se ayuda y no les importa que uno sea un torturador, un ladrón o de la familia Franco, da igual, si es de derechas se le ayuda. En cambio, los de izquierdas son diferentes, se pelean entre ellos sin importarles perder. ¡Hasta la guerra civil perdieron por desorganización y desentendimiento! Y lo que está claro es que hemos aprendido poco. ¿Pero por qué uno es de derechas? Quitando a los obreros tontos o pelotas que los votan y a los que son por tradición y poca personalidad, ser de derechas es para flipar. ¿Por que? Prácticamente casi todo el mundo está en su contra, sobre todo los artistas. Por eso ellos pasan del arte en general porque saben que no son de los suyos. No les interesa la Cultura porque hace pensar y eso no es bueno para la derecha. Ellos quieren pueblos ignorantes como los que dirigió durante cuarenta años Paquito. Pero echemos un vistazo a la historia que está ahí. La mayoría de las películas buenas son de izquierdas, la mayoría de los artistas plásticos son de izquierdas, la mayoría de los escritores son de izquierdas, la mayoría de los intelectuales son de izquierdas, la mayoría de los grandes hombres y mujeres del mundo son de izquierdas, ¿sigo? A una persona normal y corriente eso le influiría de manera drástica y le haría pensar, hasta podría avergonzarse votar a la derecha, pero no a uno/a de derechas, que se la trae floja. PP es el partido más corrupto de la historia de España, pero sus militantes van con la cara bien alta y siguen luchando por su partido. Y para rizar el rizo se entienden con VOX con dos cojones. Me quito el sombrero, así se puede ganar todo, como están demostrando. En cambio los de izquierdas siguen sin ponerse de acuerdo aunque gane la derecha o la ultraderecha, como guste más. Lo importante para la izquierda es el pueblo, el bienestar de los españoles. Para la derecha es un negocio, nada personal.