domingo, 9 de junio de 2019

UN PODER JUDICIAL DE CACHONDEO

La decisión del Supremo Judicial de España lo ha dejado claro: aún quedan franquistas. Personas que se enriquecieron y robaron todo lo que pudieron al pueblo amparados en la dictadura del Caudillo. A estas alturas ya nadie que sea coherente se cree que la transición fue auténtica. Fue una prolongación de un gobierno franquistas con los mismo perros con distintos collares. Esos sí, los fascistas dejaron un poco la puerta abierta para que el pueblo tonto se creyera que había llegado la libertad por fin, después de más de 40 años de dictadura. Y la mayoría de los españoles se lo creyó, pero nadie se paró a pensar el por qué el rey Juan Carlos fue colocado por el enano de voz aflautada, y nadie se planteó que Felipe González no sacara a la basura de Franco del Valle de los Caídos. Ni tampoco que se creara una fundación subvencionada con el nombre del dictador. Había llegado la transición y el pueblo estaba contento y los franquistas fascistas se reían hasta desencajarse la mandíbula. Y si algún tarao aún no se cree lo que he escrito, que me responda por qué el tribunal Supremo Judicial se niega a que el enano de voz aflautada sea exhumado. Quizá, ahora, Pedro Sánchez tenga el poder de cambiar este país de una vez por todas. Porque España es grande, se mire por donde se mire, solo sobran los franquistas y fachas, que es lo mismo pero repartido en 2 palabras.