Hace tiempo que escribí un
artículo sobre la inutilidad del ejército y los cretinos e ignorantes no se
cansaron de insultarme y desearme todos los males. No entendieron que a los
militares que yo me refería no era a los que están en ayudas humanitarias o
destinados en distintos países ayudando, me refería a la mayoría de los
militares que vegetan toda su vida en un cuartel de Mallorca (o de cualquier
otro sitio) rascándose la barriga hasta que se jubilan con el sueldo íntegro. A
esos me refería. Y mira por donde La Legión va a poner a dieta a su ejército
porque está gordo. ¿Y eso qué quiere decir? Quiere decir que no paran de comer
grasa, beber alcohol y ver la televisión. No lo digo yo, lo dice La Legión que
va a prohibir comer mirando la televisión y beber alcohol durante el día. Y los
legionarios que no lo cumplan se le prohibirá los únicos trabajos que tienen:
participar en desfiles militares con la cabra, en actos sociales y juras de
bandera. Lo dice la misma Legión, que ningún tarao ignorante se crea que me lo
he inventado yo. Al final he tenido razón yo en lo de la inutilidad del
ejército.