“La alternativa es un trío
de extrema derecha” dice la socialista Francina Armengol mientras que Santiago
Abascal llena el Auditórium de Palma (1.000 butacas), y se queda tan pancha. Y
yo le pregunto a la presidenta de las Illes Balears ¿qué es el independentismo?
No creo que lo tenga claro. Y la prueba está en que no es sincera con los
votantes al esconder su particular independentismo, sacándolo solo en
determinadas ocasiones y con los suyos, independentistas, también. ¿Por qué la
señora Armengol no dice claramente que es independentista? Pues muy sencillo.
Porque es una política sincera a medias en casi todos los sentidos. Pero
nosotros, los que votemos a los socialistas (quizá yo vote a Podemos, aún no lo
sé), tenemos que tenerlo claro, nuestra presidenta es independentista, catalanista
y extremista. ¿Por qué imponer la lengua del catalán por cojones es una especie
de dictadura encubierta? Los votantes lo tenemos que tener claro: si votamos al
socialismo votamos al independentismo. Y si alguien aún no lo tiene claro, que
llame al presidente Torra y le dirá que es la única presidenta autonómica con
la que mantiene relación. El socialismo en las Illes Balears es puro
independentismo. Lo tenemos crudo los que somos socialistas: ¿o extrema derecha
o el independentismo? Por eso la opción de Podemos es muy golosa.
La señora Armengol con los independentistas de Formentor.