Siempre he creído que los de
derechas son personas negociantes, interesadas y que lo tienen muy claro (no
hablo del obrero puro, duro y tonto que vota a la derecha). Por ejemplo, si
estuvieran en lugar del señor Sánchez e Iglesias ya habrían llegado a un
acuerdo hasta en los sobresueldos. Porque ellos son así: van a lo suyo y los
demás les importan un huevo. Y eso, según como se mire, es admirable. Por eso
suelen conseguir lo que quieren. Si basta ver a los mafiosos Pujol o los pisos
buitres de la señora Botella, para darse cuenta de lo unidos que están. Son
gente que se ayuda y no les importa que uno sea un torturador, un ladrón o de
la familia Franco, da igual, si es de derechas se le ayuda. En cambio, los de
izquierdas son diferentes, se pelean entre ellos sin importarles perder. ¡Hasta
la guerra civil perdieron por desorganización y desentendimiento! Y lo que está
claro es que hemos aprendido poco. ¿Pero por qué uno es de derechas? Quitando a
los obreros tontos o pelotas que los votan y a los que son por tradición y poca
personalidad, ser de derechas es para flipar. ¿Por que? Prácticamente casi todo
el mundo está en su contra, sobre todo los artistas. Por eso ellos pasan del
arte en general porque saben que no son de los suyos. No les interesa la
Cultura porque hace pensar y eso no es bueno para la derecha. Ellos quieren
pueblos ignorantes como los que dirigió durante cuarenta años Paquito. Pero
echemos un vistazo a la historia que está ahí. La mayoría de las películas
buenas son de izquierdas, la mayoría de los artistas plásticos son de
izquierdas, la mayoría de los escritores son de izquierdas, la mayoría de los
intelectuales son de izquierdas, la mayoría de los grandes hombres y mujeres del
mundo son de izquierdas, ¿sigo? A una persona normal y corriente eso le
influiría de manera drástica y le haría pensar, hasta podría avergonzarse votar
a la derecha, pero no a uno/a de derechas, que se la trae floja. PP es el
partido más corrupto de la historia de España, pero sus militantes van con la
cara bien alta y siguen luchando por su partido. Y para rizar el rizo se
entienden con VOX con dos cojones. Me quito el sombrero, así se puede ganar
todo, como están demostrando. En cambio los de izquierdas siguen sin ponerse de
acuerdo aunque gane la derecha o la ultraderecha, como guste más. Lo importante
para la izquierda es el pueblo, el bienestar de los españoles. Para la derecha
es un negocio, nada personal.