Qué simpática y sonriente estuvo
la señora Armengol con el presidente Sánchez. Estaba exultante como si fuera
amiga suya de toda la vida. Daba gusto verlos juntos y abrazándose y besándose
como si fueran dos chiquillos. Seguro que casi todos los socialistas daban
saltos de alegría. Pero mira tú por donde que todas aquellas tonterías y la
conversación que tuvieron han llevado a la absoluta vergüenza. En consecuencia
menos dinero para Baleares este 2019. Claro está que puede haber pasado una
cosa, aunque no lo sé a ciencia cierta. ¿La señora Armengol le habló a Sánchez
en catalán todo el tiempo? Porque si es así no la debió de entender y se fue de
Mallorca sin haberse enterado de la misa la mitad. He criticado muchas veces la
categoría de nuestros políticos mallorquines y no voy hacerlo otra vez porque
me da la depre. Pero lo que es evidente e incuestionable es que el Gobierno de
Madrid (Pedro Sánchez) ha pasado, como tantos años hace, de las islas y de su
amiga Armengol. ¿Pero cómo puede uno confiar en una mujer que obliga a hablar
catalán a los médicos de la Seguridad Social y a los funcionarios del
cementerio, etcétera? Es imposible, lo que pasa es que la gente es educada y no
suelta lo que piensa. Pero esto no acaba aquí, en las próximas elecciones VOX
estará muy presente en las islas. Me gustará ver lo que hará nuestra presidenta
con lo simpática y agradable que es con los de ultraderecha, que gracias a los
endebles partidos de izquierdas, ya han llegado. ¿Les obligará a hablar catalán?