En
los últimos años hemos visto como la Justicia (del PP) española ha actuado
contra todo tipo de artistas: raperos, cantantes, dibujantes, e incluso
revistas. Recordemos el secuestro de la revista más inteligente del país: El Jueves, donde se veía al Rey
beneficiándose a Leticia, toda una obra de arte de lo grotesco. Porque los
monárquicos tienen tela, recordemos a Juan Carlos I y a su hija la Infanta, que
si la mayoría del pueblo español no fuese tonto estarían en la cárcel. Pero los
monárquicos siempre han sido así, les va mucho la marcha. Y basta echar una
hojeada para ver las aberraciones que han hecho. Por ejemplo, las escenas
satíricas dibujadas en Los borbones en
pelotas; una colección de dibujos pornográficos del reinado de Isabel II de
España, que era popular por su coño insaciable, y algunos políticos de la época
follando como descosidos. Una durísima crítica a la monarquía de en uno de los
momentos más frustrantes de la Historía de España, similar en muchos aspectos
de la actual, con el señor Rajoy a la cabeza. Con decir que aún hoy no se sabe
a ciencia cierta el verdadero padre de Alfonso XII, con esto lo digo todo.
Huelga decir que los dibujos pornográficos de los monárquicos no era culpa del
pueblo, sino de las clases poderosas que no miraban más que por su interés
personal, algo parecido a lo que ocurre hoy con el PP y la Monarquía actuales.
Ahora bien, estos dibujos donde se ve los miembros de la monarquía, políticos y
militares follando como descosidos, no eran compartidos a la ligera por los de
siempre; los de arriba. De hecho, no será hasta el año 1991 cuando Los Borbones en pelotas se publicarán
por primera vez. Hasta ese momento lo habían hecho en revistas satíricas. como
hoy es El Jueves o se pasaban de mano
en mano. En conclusión, la costumbre de los de debajo de reírse de los de
arriba, supone uno de los pocos consuelos que se pueden permitir los primeros
en la sociedad en qué vivimos. Y a eso se le llama libertad de expresión. Si al pueblo no se le deja recurrir a esa
expresión se le corta las alas y es cuando surgen las manifestaciones y
posteriormente las revoluciones. Lo que surge del Arte, casualmente, solo
preocupa a los de derechas y a la monarquía, que ven peligrar sus privilegios.
¿Se han preguntado por qué no hay artistas
que pongan a parir a los de izquierdas? ¿Por qué no hay dibujos pornográficos
de políticos de izquierdas? Son 2 preguntas interesantes y de una evidencia
contundente. Así son los de derechas con la libertad de expresión, que tienen
la suya propia y normalmente no les gusta la de los demás. Lo que nos ocurre actualmente
a los españoles no deja de ser gracioso y sigue la línea de charanga y
pandereta que nos caracteriza. Estamos en democracia pero sin libertad de
expresión.